Oda a Ginette.
No se a donde habra ido a parar Ginette. Tan solo comparti con ella unos instantes, lejanos eso si, una mañana de Abril del 2001. Acababa de llegar a Paris e ingenuo de mi pensaba que todo lo que rodeaba era un cuento de hadas. Cuando uno llega a Paris, esta es una de las primeras sensaciones que a uno le abordan. Sin embargo, pasado un tiempo, cuando se toma la vida profesional y uno ha de desplazarse en metro, se conocen personajes y situaciones que te hacen sentirte afortunado. Ese fue el caso de Ginette, de quien recuerdo su nombre, y su mensaje. Algo asi como que pedia en el RER porque tenia un hijo que alimentar y al que buscar un cobijo cada noche y que la vida le habia tratado mal, rematadamente mal. Probablamente, pense, se trataba de una mujer maltratada, ya por entonces el termino violencia de genero empezaba a estar desgracidamente de actualidad. O tal vez fuera una toxicomana o una adicta al juego, como Penelope, a quien habia conocido un año antes, y que se jugaba los duros todas las tardes en el Bingo, no sin antes tragarse el capitulo diario de 'Al salir de clase'. Ginette, a diferencia de esta, no parecia haberse jugado los duros, ni antes, ni despues. Su chal de leopardo dejaba entrever una vida ociosa, y tal vez sus cejas perfiladas y pintadas , tipo Maria Jose Cantudo, apuntaban esta posibilidad. Ginette recolecto algunos francos y , tal vez, algun chequedejeuner en aquel trayecto entre Chatelet y la Gare de Lyon. Tambien se gano el corazon de alguno por su nobleza y su saber estar, porque en esas situaciones uno no siempre guarda la calma. Despues, se alejo para siempre, y aunque realice ese trayecto durante los meses siguientes, no volvimos a coincidir. Luego , escuche el mismo mensaje, mas o menos acicalado, durante tanto tiempo, que lo original no seria pensar que hay algo de teatro en alguno de los anunciantes o, mas bien, una trama inteligente. Ginette parecia sincera y asi me gustaria recordarla.